Re-diseño del isologotipo de Tersuave, principalmente relacionada con la manufactura, distribución y venta de pinturas, barnices y productos relacionados. El isologotipo actual tiene varios años ya (creo que el último re-diseño data de la década del '90) y es bastante anticuado a mi parecer, por lo que traté de realizar una versión que a partir de un tratamiento suave de la tipografía, diera la sensación de una marca moderna, rejuvenecida, pero con fuerza.
Dentro de todo, el logotipo, se mantiene bastante simple como marca la historia de los logotipos de Tersuave, que no constan de demasiada carga visual en casi ninguno de sus logotipo a través de los años.
Normalmente, la marca se maneja con la tipografía en un celeste claro, sobre fondo blanco, y actualmente, posee un contenedor gris. Personalmente, me parecía que no hacia falta tal contenedor. En cuanto a los colores, me pareció que tenía mayor impacto visual y más personalidad, un azul de valor bajo en vez del celeste y a su vez, cambié la disposición original, ya que me pareció que era mayor el contraste y por ende cobraba más fuerza, entre tipografía y fondo.
En un momento, Tersuave tuvo como isotipo un pincel de brocha gorda, actualmente tenía una suerte de pincelada roja vectorizada, que personalmente me hacía ruido, por lo que busqué cambiarla por una guía de colores, herramienta típica hoy por hoy tanto en pinturerías como en otros negocios.
Fue un diseño hecho puramente por diversión, pero impulsado porque al volver a mi casa siempre veo el isologotipo de Tersuave en una pinturería y siempre pensé que necesitaba cambiarse.
Dentro de todo, el logotipo, se mantiene bastante simple como marca la historia de los logotipos de Tersuave, que no constan de demasiada carga visual en casi ninguno de sus logotipo a través de los años.
Normalmente, la marca se maneja con la tipografía en un celeste claro, sobre fondo blanco, y actualmente, posee un contenedor gris. Personalmente, me parecía que no hacia falta tal contenedor. En cuanto a los colores, me pareció que tenía mayor impacto visual y más personalidad, un azul de valor bajo en vez del celeste y a su vez, cambié la disposición original, ya que me pareció que era mayor el contraste y por ende cobraba más fuerza, entre tipografía y fondo.
En un momento, Tersuave tuvo como isotipo un pincel de brocha gorda, actualmente tenía una suerte de pincelada roja vectorizada, que personalmente me hacía ruido, por lo que busqué cambiarla por una guía de colores, herramienta típica hoy por hoy tanto en pinturerías como en otros negocios.
Fue un diseño hecho puramente por diversión, pero impulsado porque al volver a mi casa siempre veo el isologotipo de Tersuave en una pinturería y siempre pensé que necesitaba cambiarse.
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